26 de julio de 2013

Luther, las represalias de la marginalidad.



En este  blog he hablado de Luther desde que comenzósus emisiones, y esta temporada no iba a ser menos. Aunque pierda factor sorpresa, intensidad y se repita la fórmula.

La temporada empezó bastante floja, con un primer capitulo introductorio que, sinceramente no aportaba gran cosa tras dos años de hiato, aunque hay que decir que esta pequeña tanda de episodios ha ido in crescendo de forma acelerada hasta llevarnos a las consecuencias más desesperadas.

Las tramas las hemos visto mil veces. Policía corrupto que es perseguido por sus compañeros y que eventualmente se convierte en un peligro para los suyos. Nada nuevo bajo el sol, y por eso titulo así el post, porque esas son precisamente las represalias de moverse entre el margen del bien y el mal, aunque quizá Luther es el antihéroe menos malo que podamos conocer. Y digo antihéroe porque su físico y su voz no siguen el canon de héroe que la televisión  ni el cine suele brindarnos, y es por ello por lo que quizá Idris Elba es tan atrayente y por lo que al principio fue chocante para mí.



Ahora, tras acabar con el factor sorpresa Luther se mantiene como una serie intensa e interesante pero que no rompe moldes, cosa que a veces se agradece, y perfecta para su visionado por su brevedad y atmósfera.

No hay nada más que decir, puesto que la tercera temporada de la serie continúa la estela de lo visto anteriormente, y aunque la chispa no siga ahí, sigue siendo un producto de un nivel muy alto, con una cinematografía cuidadísima y unas interpretaciones más que logradas.

23 de julio de 2013

10 Razones por las que cancelar Bunheads es un error.






 1. Está escrita y creada por Amy Sherman-Palladino.

 2. Recoge el testigo de Gilmore Girls en cuanto a tono y pulso.

 3. Los críticos la amaban, y los espectadores que la veíamos también.

 4. Sutton Foster ha sido un descubrimiento y las jóvenes actrices han ido mejorando mucho con el paso de los episodios.

 5. Bunheads creaba imagen de marca y era diferente dentro de su canal.

 6. Gilmore Girls cosechó audiencias reguleras en su primera temporada pero fue creciendo progresivamente. ¿Quién no iba a pensar en lo mismo?

 7. Las referencias a la cultura pop como ninguna otra serie es capaz.

 8. El maravilloso encanto de los personajes secundarios que estaba comenzando a brillar.

 9. Hace un retrato sano y equilibrado de los adolescentes.

 10.Sus tramas alocadas, su juegos de palabras y como no, su potencial que ha quedado en nada.

 
Bunheads ha muerto. ¡Viva Bunheads!



18 de julio de 2013

Del verde al naranja pasando por el negro.



O lo que es lo mismo, de Weeds a Orange is the New Black. Dos series unidas por el mismo tipo de humor y la misma creadora pero que, si analizas concienzudamente, no tienen tanto que ver.

Con Orange como con los demás estrenos se está viviendo un continuo binge watching o atracón de visionados gracias a que todos los episodios se suben de golpe y, es difícil sucumbir a la tentación de ver el siguiente. A mi me parece una estrategia genial, aunque puede que a esta serie no le venga tan bien como podría pensarse.




Como he comentado el humor marca de la casa, el de Jenji Kohan, ya lo conocíamos, aunque no por ello no hay que aplaudirlo, ella y Amy Sherman Palladino son las mejores en lo suyo, y sus referencias a la cultura pop insuperables, en Orange se habla desde de Mad Men hasta de The Smiths, sin despeinarse, y eso es un gran punto a favor.

Jenji es desengrasante puro, y eso creo que es lo que la hace única, ya que puede convertir los dramas humanos más feroces en comedia, y cuidado, porque esta serie conmueve, cosa que no esperaba bajo ningún concepto y es la gran diferencia con la anterior. Conmueve sin que te des cuenta, y no de forma ñoña, sino de la que te hace reflexionar. Al fin y al cabo son un grupo de mujeres encerradas en una cárcel, pero ¡Qué difícil es hacer que resulte tan interesante y que los personajes funcionen como un reloj suizo! ¡Y tener un personaje que se llame Pornstache!



La protagonista, Taylor Schilling, está fantástica, como lo estaba Marie Louise Parker, y Jason Biggs, bueno, es Jason Biggs, para lo bueno y para lo no tan bueno. Porque no hay nadie más conocido en el reparto, caras que os sonarán, desde luego, pero ningún otro actor de renombre, cosa que ayuda a creerte el entorno y las situaciones que se viven en una cárcel para nada idílica.

No quiero dar más detalles, esta es una serie que hay que ver, aunque sus episodios duren una hora, para mi, 20 minutos de más, o incluso 30, porque con media hora por episodio sería fantástico y aunque se centren en una reclusa por capítulo, cosa que no me gusta un pelo aunque esté todo bien integrado.



Así que no lo dudéis, a los fans de Weeds les llenará en hueco que dejó la serie madre, y a los que no les gustaba o estaban horrorizados por el libre albedrío que promulgaba, Orange is the New Black es mucho más comedida, efectiva y cruda, más cruda de lo que vemos, porque al fin y al cabo estamos presenciando vidas truncadas, vidas que no serán lo mismo tras entrar en prisión. Y eso cuando se cuenta bien es un triunfo.

Yo no tenía dudas acerca de Jenji, Netfix tampoco, ya que renovó su serie sin haberla estrenado y vosotros no deberíais dudarlo ni un solo instante.


Pd: Amy, si Bunheads no renueva ¿No te hace un Netfix?

11 de julio de 2013

El poder de tres…




Si algo sucedió en el set de Charmed durante sus 8 años de emisión fueron los continuos rumores sobre los problemas que ocurrieron detrás de las cámaras, problemas de los que hablé largo y tendido.

En resumen, Shannen fue despedida de la serie al no poder trabajar con Alyssa, mientras que la tercera en discordia, Holly, que es amiga íntima de Shannen desde hace más de veinte años, presionó para que Milano saliera de la serie.

Al salir de Charmed, Shannen volvió a fastidiar su segunda y última oportunidad en Hollywood, porque desde entonces no ha vuelto a trabajar en ninguna producción de renombre. Ahora, 12 años después, las peleas y disputas parecen no haber llegado a un final, máxime cuando la serie terminó, y las actrices se reprochan, aunque de forma educada, los hechos acontecidos durante el rodaje.

Las tres han pasado años y años intentando no hablar del tema y desviando cualquier posible mención a que ocurrió en 2001, tanto que se ha creado una leyenda de lo más poderosa, y en la red se pueden encontrar miles de versiones, de las que a buen seguro ninguna coincide con la realidad.

El acercamiento comienza con una simple pregunta de un fan a Doherty que quiere saber cuando hará las paces con su ex-compañera, a lo que esta, incluyendo a Milano en la contestación le responde que no hay necesidad de arreglar las cosas y que Alyssa es genial. En un movimiento bastante inusual de Milano, que sobrepasa los 2,5 millones de seguidores por los 250.000 de Shannen, le contesta que piensa lo mismo y espera que todo le vaya bien y sea feliz.



Parece que todo se haya arreglado por fin tras 12 años, pero nada más alejado de la realidad.

Alyssa, que está de promoción por Mistresses acude al programa Watch What Happens del canal Bravo en directo y una fan le pregunta por el verdadero motivo de la marcha de Shannen de la serie, a la que, ante la cara de no saber como salir de esa, la Milano intenta lavarse las manos diciendo que no tiene ni idea, pero que cree que Aaron (Dios) Spelling la dejó marchar y que su trabajo en Charmed ha sido el más importante de su vida, sin dejar de resaltar con cierta sorna, que Holly y Shannen era muy amigas y que el rodaje de la serie era como un instituto, y eso que ya tenían treinta añazos.



Pero cuando se le cambia la cara a la Milano es cuando, desde el mismo programa le recuerdan que Shannen fue a visitarlos y al preguntarle sobre tres cosas buenas sobre ella, esta con cierto sarcasmo solo acertara a decir lo guapa que era, implicando que no daba más de sí. Alyssa, mucho más diplomática accede a decir tres cosas buenas de Shannen. No obstante el ambiente está más que caldeado.



Ahora entra la tercera en discordia, Holly, que Twittea esta frase nada amistosa en colación a lo que Alyssa había dicho por televisión, dejando claro que Charmed fue un trabajo serio y que para nada era un instituto.



A lo que Alyssa le contesta de forma muy amigable saludando a su familia y dándole recuerdos de sus padres, mostrándose conciliadora.



Como no Shannen, al ver el revuelo que está tomando el asunto decide, también, contestar al tweet de Holly diciendo, básicamente, que cada uno tiene su opinión y que la serie le ayudó a pagar los tratamientos de su padre y poco más.



Un fan pregunta a Shannen que no entiende porque Alyssa saca balones fuera y dice que Doherty dejó la serie por diferencias creativas, a lo que la diva contesta con sarcasmo.




Holly prefiere callar, mientras que Alyssa da las gracias a sus fans por el apoyo y Shannen, después de todo, prefiere no caldear más el asunto.



Todo muy divertido y bastante contenido, pero mordaz y ácido. Brad Kern, el productor ejecutivo de la serie, dijo cuando terminó, que había sido un infierno de rodaje durante 8 años, y que las historias detrás de las cámaras daban para una serie igual o más interesante. Nosotros, desde luego, siempre seguiremos el cat fight Alyssa-Shannen, porque aunque esta última vaya de reformada por la vida y se haya hecho amiguísima de su otrora archienemiga, no ceja en el empeño de seguir dándonos estos grandes momentos.